La Segunda Guerra Mundial fue un conflicto militar global que se desarrolló entre 1939 y 1945.
Elisabeta Goia de Macana es una mujer rumana nacida en 1942, en pleno apogeo de la Segunda Guerra Mundial.
Fue la mayor contienda bélica de la historia, con más de cien millones de militares movilizados y un estado de “guerra total” en donde la capacidad económica, militar y científica estuvo al servicio del esfuerzo bélico, borrando la distinción entre recursos civiles y militares.
Marcada por hechos de enorme repercusión que incluyeron la muerte masiva de civiles (el Holocausto, los bombardeos y el uso, por única vez, de armas nucleares en un conflicto militar) la Segunda Guerra Mundial fue la más mortífera de la historia con un resultado de víctimas del 2,5 % de la población mundial.
Beta, como la llaman familiares y amigos, nació en Rumania donde fue ingresada con sus 2 hermanas, madre y abuela a un gueto teniendo solo 2 años de edad.
Al salir del gueto gracias a su padrastro, quien las adoptó y amó como hijas biológicas, lograron escapar hasta Yugoslavia. La vida allí no fue la mejor, pero al menos contaba con el amor de su familia y la esperanza de salir adelante.
Finalizando la guerra, se les permitió salir de Yugoslavia para llegar a Italia, donde pudo retomar su educación y vivir un poco más su atormentada infancia.